Como ya es usual el científico nos ha hablado del dossier un día más, al parecer ha encontrado unos rarísimos puntos de colores y al tocarlos en orden han hecho aparecer a un grupito bastante inesperado… ¡Los Vengadores! Sin embargo, nos han dicho que tal vez podrían haberse llevado algún villano con ellos.
Dispuestos a convertirnos en héroes nos
hemos puesto a entrenar con los Vengadores y
ya por la tarde nos hemos encontrado con Thanos, el némesis de los
vengadores, que se había compinchado con la organización. Sabíamos lo que
teníamos que hacer: conseguir las preciadas gemas del infinito de Thanos.
Cuando por fin las hemos robado todas y tras ver a nuestros enemigos burlarse
en nuestras narices, nos hemos dado cuenta de que habíamos recogido unas gemas
falsas y hasta mal pintadas (que poco arte tienen estos villanos), con aún más
determinación hemos conseguido arrebatarle las verdaderas y el muy cobarde de
Thanos ha huido, ¡Por fin todo va a volver a la normalidad! Mas tarde hemos
descubierto que el poder del guantelete de Thanos provenía de una extraña frase
“La respuesta que buscas es él”, comprendiendo que el mensaje nos hablaba de
Dios le hemos explicado al científico el origen de la energía y ha sentido
mucha curiosidad.
Por lo que hemos invitado al científico a
celebrar por la noche la eucaristía, que le ha llegado a cautivar. A partir de
ahora se ha propuesto aprender muchísimo más de Jesús.
Todo esto de pelear como superhéroes nos
ha costado nuestra preciada energía y al fin estamos listos para descansar como
nos merecemos.
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